¿Por qué el martes 13 se considera día de mala suerte?
Conoce las raíces históricas y culturales que explican ¿Por qué el martes 13 se considera día de mala suerte? Un análisis comparativo entre la tradición latina y la francesa que todo venezolano en el extranjero debería conocer.
ANALISIS
5/13/20259 min leer
Antes de comenzar este artículo, quiero dejar algunas cosas en claro acerca de mi propia percepción del martes 13: la primera es mi definición de SUERTE (sea buena o mala). Una vez leyendo a Anthony Robbins leí que la suerte no es otra cosa que cuando la OPORTUNIDAD y la PREPARACION se juntan. Y esa es para mí una excelente definición de la palabra suerte.
Lo segundo que quiero decir es que tengo 2 gatos negros, así que realmente para mi esas supersticiones carecen de todo fundamento (aunque debo reconocer que a veces me da miedo pasar por debajo de una escalera, pero no por mala suerte, sino porque me pueda caer algo en la cabeza). Una vez aclarados estos puntos, ¡Comencemos!
Si hay algo que los latinos llevamos en nuestro ADN cultural es la superstición, y quienes vivimos en Francia —país que tiene sus propias tradiciones sobre la mala fortuna— podemos encontrarnos en una encrucijada de creencias que pueden resultar fascinantes. Como venezolano en territorio francés, siempre me ha llamado la atención cómo las supersticiones nos unen y nos distinguen culturalmente. Una de las más extendidas en Latinoamérica es el temor al martes 13, mientras que en Francia y gran parte de Europa, el día de mala suerte por excelencia es el viernes 13.
El contraste cultural: martes 13 vs. viernes 13
Cuando llegué a Francia, me sorprendió descubrir que mis nuevos vecinos y compañeros de trabajo no tenían ningún problema con el martes 13. De hecho, muchos me miraban extrañados cuando mencionaba "martes, ni te cases ni te embarques". Para ellos, el día fatídico es el viernes 13, algo que para nosotros los latinos no tiene mayor significado negativo (incluso podría considerarse un buen día para finalizar la semana laboral).
Este contraste cultural me llevó a investigar más sobre el origen de estas creencias. ¿Por qué nosotros los latinoamericanos tememos al martes 13 mientras que los franceses y anglosajones evitan el viernes 13?
Los orígenes del martes 13 como día de mala suerte
La superstición alrededor del martes 13 tiene raíces profundas que se remontan a diferentes tradiciones culturales y religiosas. Veamos los principales factores que han contribuido a esta creencia:
La influencia romana y griega
En la antigua Roma, Marte era el dios de la guerra, y de su nombre deriva la palabra "martes" en español. Los romanos asociaban este día con el inicio de conflictos y batallas, lo que naturalmente generaba temor y aprensión.
Para los griegos, el martes estaba bajo la influencia del planeta Marte, considerado un astro violento y sanguinario. La astrología antigua vinculaba este día con energías agresivas y destructivas.
La caída de Constantinopla
Un hecho histórico que reforzó esta superstición fue la caída de Constantinopla en manos de los turcos otomanos, que ocurrió un martes 29 de mayo de 1453. Aunque no fue específicamente un martes 13, este evento catastrófico para el cristianismo contribuyó a la mala reputación del día martes en la cultura mediterránea.
La tradición judía y el número 13
En la numerología judía, el número 13 está asociado con conceptos como el mal y la mala suerte. La Torá menciona 13 atributos de Dios relacionados con su misericordia, pero también existe la creencia de que hay 13 espíritus malignos. Esta ambivalencia ha alimentado la superstición alrededor del número.
La combinación fatal: día de Marte y el 13
Cuando se combinan el martes (día de Marte, dios de la guerra) y el número 13 (considerado de mala suerte en muchas culturas), se crea una fecha que para muchos representa una doble amenaza. Esta combinación ha sido especialmente temida en los países de habla hispana.
El martes 13 en Venezuela y América Latina
En Venezuela, como en gran parte de Latinoamérica, el martes 13 es considerado un día de mala suerte por excelencia. Tenemos un dicho popular que reza: "Martes 13, ni te cases ni te embarques", advirtiendo sobre los peligros de iniciar proyectos importantes en esta fecha.
Esta creencia está tan arraigada que muchas personas evitan:
Firmar contratos importantes
Comenzar un nuevo trabajo
Realizar operaciones médicas (a menos que sean urgentes)
Emprender viajes largos
Celebrar bodas o fiestas significativas
Es común que en esta fecha se tomen precauciones adicionales, como llevar amuletos de la suerte o realizar pequeños rituales protectores.
El viernes 13: la versión francesa y anglosajona
En contraste, en Francia y en los países anglosajones, es el viernes 13 el día que produce temor. Esta creencia tiene sus propios orígenes:
La mitología nórdica y el último banquete
Una de las explicaciones se remonta a la mitología nórdica. Se cuenta que hubo un banquete en el Valhalla al que asistieron 12 dioses. Loki, el dios del engaño, llegó sin invitación convirtiéndose en el invitado número 13, y durante la celebración provocó la muerte de Balder, el dios de la alegría y la bondad.
La última cena y Judas
En la tradición cristiana, durante la Última Cena estaban Jesús y sus 12 apóstoles, siendo 13 comensales en total. Judas, quien traicionó a Jesús, habría sido el decimotercer comensal, lo que reforzó la idea de que el número 13 trae desgracia.
Los Templarios
Otro evento histórico que contribuyó a esta superstición fue la persecución de los Caballeros Templarios. El viernes 13 de octubre de 1307, el rey Felipe IV de Francia ordenó el arresto masivo de los miembros de esta orden religiosa y militar, acusándolos de herejía. Muchos fueron torturados y ejecutados, lo que marcó el inicio del fin de esta poderosa organización.
El choque cultural para un venezolano en Francia
Viviendo en Francia como venezolano, he experimentado este choque cultural de manera directa. En ocasiones, cuando menciono mi aprensión por el martes 13, mis amigos franceses sonríen con condescendencia, mientras que cuando llega un viernes 13, son ellos quienes expresan cierta inquietud.
Esta diferencia cultural me ha llevado a reflexionar sobre cómo las supersticiones viajan con nosotros y forman parte de nuestra identidad. Aunque llevo varios años en Francia, sigo sintiendo un pequeño escalofrío cuando el calendario marca un martes 13, a pesar de que a mi alrededor nadie parece darle importancia.
¿Por qué seguimos creyendo en estas supersticiones?
En pleno siglo XXI, con todos los avances científicos y tecnológicos, cabe preguntarse por qué seguimos dando crédito a estas creencias. Hay varias razones:
Herencia cultural
Las supersticiones se transmiten de generación en generación y forman parte de nuestra herencia cultural. Aunque racionalmente podamos cuestionar su validez, emocionalmente seguimos conectados a estas tradiciones que nos vinculan con nuestros antepasados.
El sesgo de confirmación
Tendemos a recordar los eventos negativos que ocurren en días como el martes 13, mientras que olvidamos los días "de mala suerte" en los que no sucede nada extraordinario. Este fenómeno psicológico, conocido como sesgo de confirmación, refuerza nuestras creencias.
El sentido de control
En un mundo lleno de incertidumbres, las supersticiones nos ofrecen una sensación de control. Si evitamos hacer ciertas actividades en días específicos, sentimos que estamos tomando precauciones y protegiendo nuestro bienestar.
El valor social
Compartir creencias y supersticiones refuerza los lazos sociales. Para muchos inmigrantes venezolanos en Francia, mantener estas tradiciones es una forma de conectar con sus raíces y con otros compatriotas.
El martes 13 en diferentes culturas
La percepción del martes 13 varía significativamente entre diferentes culturas y regiones:
En el mundo hispano
En países como España, México, Argentina y, por supuesto, Venezuela, el martes 13 es considerado un día de mala suerte. La expresión "martes 13, ni te cases ni te embarques" es común en todos estos países.
En Grecia y países de influencia helénica
Para los griegos, el martes es un día especialmente nefasto. En la tradición griega, este día está relacionado con la caída de Constantinopla y otros eventos trágicos de su historia.
En Italia
Curiosamente, en Italia, el día de mala suerte no es ni el martes 13 ni el viernes 13, sino el viernes 17. Esto se debe a que en números romanos, XVII es el anagrama de VIXI, que en latín significa "he vivido", implicando "estoy muerto".
Cómo afrontan los venezolanos en Francia esta diferencia cultural
Para los venezolanos que vivimos en Francia, esta diferencia cultural puede manifestarse de varias maneras:
Mantenimiento de tradiciones
Muchos venezolanos en Francia seguimos observando con cierta cautela el martes 13, a pesar de que nuestro entorno no comparta esta creencia. Es una forma de mantener viva nuestra herencia cultural.
Adopción de nuevas supersticiones
Con el tiempo, algunos inmigrantes venezolanos también comenzamos a sentir cierta aprensión por el viernes 13, adoptando las creencias locales y combinándolas con las nuestras.
Reinterpretación de las tradiciones
Otros optan por una reinterpretación más simbólica de estas supersticiones, reconociéndolas como parte de nuestra identidad cultural sin permitir que afecten realmente nuestras decisiones cotidianas.
La ciencia detrás de la superstición
Desde una perspectiva científica, las supersticiones como el temor al martes 13 son manifestaciones de patrones de pensamiento mágico que tienen raíces evolutivas.
Pensamiento mágico y supervivencia
Nuestros antepasados que establecieron conexiones causales (incluso cuando no existían) entre eventos y circunstancias tenían más probabilidades de sobrevivir. Por ejemplo, si alguien enfermaba después de comer cierta planta, era mejor evitar esa planta en el futuro, incluso si la enfermedad fue coincidencia.
Reducción de ansiedad
Las supersticiones también funcionan como mecanismos para reducir la ansiedad frente a lo desconocido. Creer que podemos influir en nuestro destino evitando ciertos días o realizando rituales específicos nos proporciona una sensación de seguridad.
El efecto placebo de la superstición
Curiosamente, algunas investigaciones sugieren que las supersticiones pueden tener un efecto positivo similar al placebo. Si creemos que un amuleto nos protege o que hemos tomado las precauciones adecuadas en un día "peligroso", nuestro rendimiento y bienestar pueden mejorar.
La percepción del martes 13 en la era digital
En la era digital y globalizada, la percepción del martes 13 está evolucionando:
Memes y cultura popular
Las redes sociales han convertido el martes 13 en un tema recurrente para memes y bromas. Esta aproximación más ligera y humorística ha reducido en cierta medida el temor tradicional asociado a esta fecha.
Comercialización de la superstición
Al igual que ocurre con Halloween o el viernes 13 en los países anglosajones, el martes 13 se ha convertido en algunas regiones en una oportunidad comercial, con ofertas especiales y campañas de marketing temáticas.
Contranarrativas
También han surgido movimientos que intentan desmitificar estas fechas. Por ejemplo, en algunos lugares se organizan eventos especiales en martes 13 para demostrar que no hay razón para temerle al día.
Consejos para venezolanos en Francia en un martes 13
Respeta tus creencias sin que te limiten
No hay nada de malo en mantener ciertas tradiciones y supersticiones como parte de tu identidad cultural, siempre que no limiten severamente tu vida cotidiana o generen ansiedad excesiva.
Aprovecha para compartir tu cultura
Puedes utilizar el martes 13 como una oportunidad para compartir aspectos de la cultura venezolana con tus amigos franceses, explicándoles el origen de esta superstición y cómo se vive en Venezuela.
Combina tradiciones
Así como hemos adoptado celebraciones francesas como la Galette des Rois o la Fête de la Musique, podemos integrar la preocupación francesa por el viernes 13 a nuestro repertorio cultural, enriqueciendo así nuestra experiencia bicultural.
Usa el humor como herramienta
El humor es una excelente manera de lidiar con las supersticiones. Bromear sobre el martes 13 puede ayudarte a reducir la ansiedad que pueda generarte esta fecha.
Cómo el contexto migratorio afecta nuestra relación con las supersticiones
El proceso migratorio puede intensificar o modificar nuestra relación con las supersticiones tradicionales:
Refuerzo de la identidad
En un contexto migratorio, las supersticiones y tradiciones pueden convertirse en importantes marcadores de identidad. Mantener la creencia en el martes 13 puede ser una forma de afirmar nuestra venezolanidad.
Nostalgia y conexión con el país de origen
Observar estas tradiciones puede ayudarnos a mantener un vínculo emocional con Venezuela, recordándonos nuestra infancia y las creencias que nos inculcaron.
Adaptación e integración
Con el tiempo, nuestra relación con las supersticiones puede evolucionar como parte de nuestro proceso de integración, incorporando elementos de la cultura francesa a nuestras creencias.
Reflexión final: el valor de mantener nuestras tradiciones
Más allá de si creemos realmente en la mala suerte del martes 13, mantener estas tradiciones tiene un valor importante para los venezolanos en Francia:
Patrimonio cultural inmaterial
Las supersticiones forman parte de nuestro patrimonio cultural inmaterial y mantenerlas vivas contribuye a la diversidad cultural global.
Puente entre generaciones
Para quienes hemos formado familia en Francia, transmitir estas creencias a nuestros hijos puede ser una forma de conectarlos con sus raíces venezolanas.
Pluralidad cultural
Vivir entre dos culturas nos permite experimentar y comprender diferentes visiones del mundo. La coexistencia del temor al martes 13 y al viernes 13 es un ejemplo perfecto de esta pluralidad.
Conclusión
El martes 13 como día de mala suerte es mucho más que una simple superstición; es un elemento cultural que nos acompaña a los venezolanos incluso cuando nos encontramos a miles de kilómetros de nuestra tierra. En Francia, esta creencia adquiere nuevos matices al contrastarla con la tradición local del viernes 13.
Para los venezolanos que vivimos en Francia, estas diferencias culturales representan una oportunidad de reflexión sobre nuestra identidad, nuestras creencias y nuestro proceso de adaptación a una nueva sociedad. Lejos de ser una simple curiosidad, el contraste entre el martes 13 y el viernes 13 nos habla de historia, de migración y de cómo las culturas se entrelazan y evolucionan.
¿Y tú, sigues temiendo al martes 13 o ya te has acostumbrado a preocuparte por el viernes 13? O tal vez no creas en nada de esto. Escríbelo en los comentarios. Y comparte este articulo con tus amigos supersticiosos.

